Las generaciones actuales sentimos pasión por la tecnología. En general, ansiamos el último Smartphone que aparece en el mercado. Se nos va la vista el que porta un Smartwatch. Soñamos con la última SmartTV.
Todo aquello que va precedido de la palabra «Smart» («inteligente» en castellano) capta nuestra inmediata atención y deseo.
Sin embargo, ¿somos conscientes de todo lo que captan y transmiten estos dispositivos «inteligentes»?
Cualquier teléfono móvil está revelando en todo momento el recorrido de su portador, pues se va registrando por las antenas que se encuentra en su recorrido. De esta forma es posible establecer el recorrido realizado por una persona revisando los registros de las antenas por las que ha pasado.
Un Smartphone, además, dispone de un conjunto de sensores y dispositivos que hace posible, si no está configurado adecuadamente, que cada cosa que hagamos con él revele información personal. Si sacamos una foto con el GPS activado, la foto captada incluirá las coordenadas geográficas donde fue obtenida y si publicamos un comentario en alguna red social, la localización también irá con el comentario. Todo eso sin olvidar que también dispone de al menos una cámara y un micrófono. Debemos tener presente que existen numerosos programas espía que pueden, recogen toda la actividad del Smartphone (llamadas, mensajes, etc.). También estos programas permiten controlarlo remotamente y abrir el micrófono y la cámara para escuchar y captar imágenes. Desconfíe si le regala un amigo (o novio/a) un Smartphone desprecintado y no lo pierda de vista si se lo deja a alguien. Instalar una aplicación de este tipo no lleva más de 30 segundos. No sea confiado, no son tiempos para ello.
Un Smartphone es un localizador y espía que, además, sirve para llamar.
Y qué me dice de las SmartTV. Aquí se combinan las dos cosas que más nos gustan: la televisión e Internet. Los últimos modelos de SmartTV pueden incluso recibir órdenes orales para cambiar de canal o subir el volumen tan solo con la voz. Son todo ventajas. ¿O no?
Si leemos la Política de Privacidad de la SmartTV nos indica que los datos recogidos (nuestra voz) será enviada, a través de Internet, «a terceras compañías que convierten la voz en texto para ofrecer el servicio de reconocimiento de voz». Indica también que no es conveniente hablar de cosas confidenciales delante de ella, pues todo, todo, será enviado. Vamos, que la tele se entera de todo, y además, lo cuenta. Y todo legal.
Recuerde: nos lo están avisando en su Política de [NO] Privacidad.
2 de Febrero de 2016 – Artículo para la sección Innovadores del periódico El Mundo Castilla y León.